La cumbre de Ministros de Relaciones Exteriores de la OTAN de la semana pasada tuvo como tema central la situación en Afganistán, o tal como se está reconociendo: la situación en "Afganistán y Pakistán ya que deben ser analizados en conjunto".
Hay pocos países para los cuales la seguridad en Afganistán sea tan importante como lo es para la República Islámica de Irán. De ahí las iniciativas diplomáticas iraníes a favor de la estabilidad afgana.
El lunes 9 de Marzo, el ministro afgano de Asuntos Exteriores, Rangin Dadfar Spenta, quien se encuentra en Irán para participar de 18º Reunión de Ministros de Relaciones Exteriores de la Organización de Cooperación Económica ha dicho: “Irán es uno de los países más importantes de la zona además del amigo más cercano de Afganistán”.
El presidente pakistaní, Asef Ali Zardari, viajará la próxima semana a Irán para firmar una serie de acuerdos bilaterales, viaje que seguramente servirá para acercar las posiciones de ambos estados.
Irán tiene una posición ideal cooperar con la estabilidad regional, algo que hasta este momento había sido negado por cuestiones más ideológicas que reales. De ahí que la Secretaria de Estado de los Estado Unidos de América, Hillary Clinton, haya dicho que "es deseable que Irán sea invitado como vecino de Afganistán" a la próxima cumbre del 31 de Marzo que se realizará en Holanda.
Si Irán acepta participar de esta cumbre sería la mejor manera de retornar al diálogo con los grandes potencias a la vez que se aceptaría la importante posición regional de Teherán.
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